Lo más lejano que he viajado es Chile. Para mí es difícil para hablar de esta experiencia porque es un evento tan reciente y todavía estoy pensando y procesando el viaje. Es extraño ahora porque todos me preguntan sobre el viaje, o realmente, sólo algunos me preguntan. Muchas personas no recuerdan y otros piensan que he estado acá por mucho tiempo en vez de una semana. Pero para mí, aunque mi mente sea en inglés de nuevo y mi vida acá sienta muy normal en muchas maneras, todavía es algo sobre que pienso mucho. Cuando veo a gente que conozco, estoy pensando en Chile y el hecho que probablemente es la primera vez que la he visto en cinco o más meses. Pero no es lo mismo para ellos porque no tienen la misma experiencia. Y para los quién me preguntan, sólo me preguntan sobre mi viaje en general. Casi siempre, ¿Cómo está tu viaje?. Y cuando respondo, “excelente” o “increíble,” ellos no me preguntan más. Si ellos me preguntan más, me preguntan de mis actividades favoritas o algo similar, y cuando respondo con algo del impacto de la iglesia o la fidelidad de Dios, la realmente mejor parte del viaje, ellos buscan otra respuesta. Es extraño, pero en algunas maneras, estoy muy agradecida. Me da cansancio para hablar de la experiencia porque requiere tratando de explicar eventos, momentos, lugares y experiencias imposible a describir bien. Ahora, estoy feliz para acercarme los recuerdos por ahora. En el futuro, estaré lista, pero ahora, voy a disfrutar la experiencia por mí misma.