Cuando éramos recién casados, mi esposo y yo tuvimos un viaje a Argentina para celebrar nuestra luna de miel. Quisimos aprender sobre una cultura diferente y disfrutar la belleza, la comida, y el vino de ese país.
Fuimos en diciembre y enero, que es el verano allí pero no aquí. Pasamos la primera parte del viaje en Puerto Madryn y Puerto Pirámides. Relajamos en la playa, comimos muchísimas empanadas, y fuimos en unas excursiones para ver los animales salvajes como la vicuña, los pingüinos, y el ñandú. Tomamos un barco de Puerto Pirámides para ver las hembras y los cachorros de la ballena franca austral, que eran muy amables e interesantes.
Cenamos la Nochebuena en Puerto Pirámides con una mescla de argentinos y turistas extranjeros en un restaurante muy lindo. Pasamos el día de Navidad en la playa con los ñoquis, la fugazzeta, y una botella de vino. ¡Fue la primera vez en que me quemó el sol durante la Navidad!
Luego pasamos algunos días en Mendoza, que es una región famosa por el vino. Viajamos en un bus con asientos como camas, y era un modo de transportación muy conveniente. Me lo recomiendo mucho porque se puede pasar un viaje de trece horas durmiendo por la mayoría del tiempo y se sirve el champán antes de la hora de acostarse.
En Mendoza alquilamos dos bicicletas y hicimos una excursión de bodegas. Además del Malbec, nos encantábamos el probar de diferentes tipos del vino como el Torrontés, que no es tan fácilmente disponible aquí en nuestra ciudad. Visitamos también un parque de aguas termales al pie de los Andes. Sin embargo, mis partes favoritas fueron las cenas deliciosas y el tomar del helado cada día por la tarde.
Para la última parte de nuestro viaje nos quedamos en tres barrios diferentes de Buenos Aires, y fuimos por dos días a Colonia del Sacramento, Uruguay. Mis memorias más fuertes de ambos lugares son de la comida. A mi esposo y yo nos gusta comer a través de cualquiera parte en la que viajamos. Me acuerdo el bistec, la pasta, y mi favorita absoluta: la cazuela. Por fin compré recientemente una cazuela para mi esposo, quien es cocinero fabuloso. ¡No puedo esperar mi primera cazuela hecha en casa!